
Un artista polifacético y hombre de ideas a menudo contradictorias. De la vida y el trabajo de Ai Weiwei se ha escrito mucho y en todos los idiomas: desde el sufrimiento de la familia, en contraste con el gobierno chino, la redención que es capaz de dar a su padre a través de la investigación y la práctica de la libertad intelectual. Esta exposición quiere mostrar a Ai Weiwei en su complejidad, un hombre para quien el arte es una forma de vida íntimamente ligada a las circunstancias sociales y políticas de su tiempo, un artista con una gran convicción humanista intelectual en la capacidad del hombre para contribuir con todos sus movimientos a la mejora de la sociedad. Ai Weiwei expresa con su optimismo este compromiso en varios frentes, que van desde el arte a la arquitectura del cine, la literatura y el documental, a la acción en los medios sociales y protestas públicas. Las diferentes áreas de actividad, sin embargo tienen un único objetivo: la expresión individual libre de las imposiciones de todo tipo para promover el intercambio mutuo y el intercambio entre los individuos. Ai Weiwei trabaja en la comunicación y significados sociales para encontrar la palabra en un país enmudecido por la ideología de las masas y el utopismo social que actúa para armonizar el pensamiento y eliminando la posibilidad de un acercamiento crítico a la vida.
Más información: www.galleriacontinua.com
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